Cómo sanar tu sistema nervioso
La desregulación del sistema nervioso es un fenómeno sorprendentemente generalizado. Según la teoría polivagal, desarrollada por el neurocientífico Stephen Porges en la década de 1990, existe un sistema muy complejo de señales que se transmiten entre el cerebro y el cuerpo a lo largo de las diversas ramas del nervio vago. Esta vía, que va desde el cerebro hasta el abdomen, es parte integral del funcionamiento de los órganos y las respuestas hormonales, como parte del Sistema Nervioso Autónomo. Cuando el SNA se despierta por una sensación de amenaza o estrés, se activa la respuesta de lucha o huida. Si el SNA se ve abrumado, el cuerpo comienza a entrar en un estado de congelación o apagado. Estas respuestas son imprescindibles para la supervivencia humana básica, pero los mensajes pueden confundirse y provocar una activación y una desregulación crónicas, lo que es perjudicial para la salud física y psicológica. Esta tensión en el cuerpo puede provocar todo tipo de dolencias, desde ansiedad hasta problemas de digestión, dolor crónico y enfermedades potencialmente mortales. Sanar el sistema nervioso es una pieza vital del rompecabezas del bienestar.
Escucha tu cuerpo
Sintonizar sus reacciones y respuestas físicas es el primer paso hacia la curación del sistema nervioso. El ritmo y las trampas de la vida moderna han creado una desconexión dañina entre la mente y el cuerpo, lo que resulta en una dependencia excesiva de la intervención médica cuando las cosas van mal. Pero nadie más puede entender nuestro propio cuerpo como nosotros. Comience por prestar atención a las sensaciones, reacciones y cambios sutiles que ocurren día a día sin juicio, solo curiosidad.
Comprenda su respuesta de lucha, huida y congelación
¿Cómo reaccionas física y emocionalmente ante diferentes acontecimientos en tu vida diaria? La lucha, la huida y la congelación se manifiestan de manera diferente cuando no hay un león del que huir o luchar. La ansiedad y el pánico son síntomas de una respuesta de huida no resuelta, mientras que la irritabilidad y la ira se correlacionan con un sistema nervioso en modo de lucha. Esté atento a indicadores como la frecuencia cardíaca, la respiración, la tensión muscular y los pensamientos acelerados, así como los comportamientos que pueden desencadenarse: los atracones de televisión, los trastornos alimentarios, el consumo de alcohol y otras adicciones son formas de adormecer y hacer frente a un sistema nervioso abrumado en la congelación.
Reconoce tus desencadenantes
La función evolutiva del Sistema Nervioso Autonómico puede habernos mantenido a salvo de los depredadores en la naturaleza, pero aún no nos hemos adaptado a los factores estresantes del siglo XXI. ¿Qué situaciones generan una respuesta física de lucha, huida o congelación en su cuerpo? Es posible que no sean necesariamente negativos y que no tengan sentido; para muchas personas, es el estrés crónico de una cultura adicta al trabajo. Las situaciones desencadenantes a menudo son inofensivas en sí mismas, pero el sistema nervioso se activa por una asociación con un trauma que quizás ni siquiera recuerdes.
Encuentre apoyo en su recuperación
Hablar con un profesional sobre sus experiencias, desencadenantes, reacciones y comportamientos es una forma importante de comprenderlos. A partir de ahí, puede comenzar a abordar la causa raíz de la desregulación de su sistema nervioso y comenzar a superarla. Encuentre un terapeuta, entrenador o profesional holístico capacitado para apoyar su viaje de curación y busque una comunidad de personas con cuyas experiencias pueda relacionarse y compartir.
Tranquilízate a través de prácticas curativas
Las prácticas holísticas suelen ser eficaces para establecer una sensación de seguridad y calmar el sistema nervioso. El yoga, la meditación, la respiración, la sanación energética o formas simples de cuidado personal pueden tener un efecto inmediato, pero cuando se practican con regularidad, también pueden contribuir a la regulación a largo plazo del sistema nervioso. Los tratamientos como el masaje, el reiki y la acupuntura también son muy beneficiosos.
Comprometerse con el proceso
En definitiva, sanar tu sistema nervioso es un compromiso diario. Cuanto más amable seas contigo mismo y con tu cuerpo, más tranquilo será tu viaje. Reducir el consumo de cafeína, mantenerse hidratado y crear hábitos saludables para un sueño de calidad puede ayudar a regular un sistema activado. Y ten en cuenta cómo te consideras a ti mismo: el diálogo interno negativo equivale a tener un león persiguiéndote dentro de tu propia cabeza. Muévase suavemente y sea paciente.
---------------------------------
Todo el contenido de nuestro sitio web se investiga minuciosamente para garantizar que la información compartida esté basada en pruebas. Para obtener más información, visite la revista académica que influyó en este artículo: Autonomic Function